Hoy me apetecía ser un poco didáctica y os voy a ilustrar sobre un árbol que aunque no es autóctono deberíamos conocer puesto que se trata de una de las dos especies en explotaciones forestales más extendidas del norte de la peninsula: El eucalipto blanco.
Como digo no es originario de aquí, sino de Australia. Es una especie con muchas peculiaridades empezando por las hojas, que cambian de forma y color a medida que el árbol va haciéndose adulto. Pasan de ser redondas y de color azul blanquecino a alargadas en un verde intenso.

Sus flores que brotan a principios de primavera, producen abundante néctar, alimento de insectos y de aves. Es decir, son flores melíferas, aunque es difícil ver a las abejas domesticas (Apis mellifera) en pleno apogeo por la gran altura a la que se encuentran las flores.

Se trata de una especie pirófila, es decir, que utiliza el fuego como arma para desarrollarse. Los especímenes adultos sueltan la corteza a modo de tiras que hacen que el fuego se extienda con más facilidad, para que sus semillas, resistentes al fuego, sean las únicas que sobrevivan al incendio mientras la competencia arde y así el bosque de eucalipto pueda prosperar. Además, utiliza las cenizas que son un excelente abono.

Es un árbol que absorbe muchísima agua, por eso se desarrolla tan bien en el norte de la península. Desgraciadamente en Euskal Herria solo se utiliza para hacer masa de papel, pero en otros lugares tiene usos tan diversos como leña, muebles, durmientes de ferrocarril, carpintería naval… e instrumentos como el didgeridoo (originalmente llamado yidaki) que es un tubo de madera que se hace sonar soplando en su interior, en sus orígenes se fabricaba a partir de troncos muertos de eucalipto.
El bosque de eucalipto aquí no tiene depredador ni ecosistema, pues es el koala el único animal que se alimenta casi exclusivamente de las hojas, corteza y frutos del eucalipto. El koala también es el único que puede tolerar la toxicidad de este gran árbol (se considera que la ingestión de 30 ml de su aceite esencial es letal para el ser humano) pero ha sido siempre utilizado como medicinal. Sus hojas adultas contienen un aceite esencial que sirve para combatir los resfriados, bajar la fiebre y reducir los niveles de azúcar en sangre.
El ejemplar más alto de Europa se encuentra en Viveiro (Lugo) y se llama el Abuelo de Chavín con sus 130 años tiene 71,4 metros de altura y 10,5 m de perímetro en su base. A continuación la prueba gráfica que lo verifica:

Si sois de esos a los que les gustan las ilustraciones botánicas en plan antiguo os dejo este enlace para que podáis descargar esta imagen libre de licencias y usarla para decorar la pared, el escritorio, mesita de noche, agenda, papel de regalo…lo que se os ocurra! Alguien tiene más ideas?
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